CALMA
Así se siente la calma del anochecer en la sierra antes de las lluvias, calma engañosa que quiebra la seguridad del ambiente. Pacen tranquilas las lleguas abstraídas como abstraídos estábamos en muestros quehaceres y enterrados en muestras rencillas comimos barro, bebimos lágrimas, gritamos más que los truenos que el viento se llevó para siempre. Fue calma, pero el cielo habla y clama.